Se es formador, formadora PRH, por vocación. Es decir, porque la persona adhiere de manera natural,

  • a la visión que PRH tiene del ser humano y la sociedad,
  • al sistema explicativo del hombre en crecimiento propio de PRH,
  • a la pedagogía de auto-descubrimiento que busca que cada hombre y cada mujer libere todas las riquezas y potencialidades de su ser y viva su vida en plenitud –armoniosamente- y de modo eficaz.
  • a una Escuela Internacional de Formación que unifica a los formadores repartidos en los 5 continentes y homologa la formación que es entregada a través de nuestros diferentes medios de formación.
  • y, a un código deontológico que rige la relación profesional con las personas que siguen nuestra formación.

Para llegar a ser formador/a se requiere, en primer lugar, vivir dos planes de formación. Estos son:

 

  • Formación Personal Metódica (FPM)

Este es un programa que permite comenzar un camino personal con un plan de formación adaptado al propio ritmo, en donde cada uno se fija los objetivos para el año, a través de un proyecto de formación y con una mirada global sobre su persona. La persona se compromete a hacer un balance anual y a tener un acompañamiento personal y pedagógico. Se pide, además, hacer algunos talleres de formación.

Este programa dura 3 años.

 

  • Formación a la Relación de Ayuda PRH (FRA)

Este es un ciclo de formación en donde se hacen diversos talleres, con el objetivo de formar de manera metódica y profunda a la relación de ayuda PRH.

Además, se comienza una formación a la investigación del ser humano en crecimiento. Todo esto, con apoyado por guías pedagógicas específicas y por un acompañamiento.

La duración de este ciclo de formación es de 3 años.

Después de haber realizado los dos programas de formación (FPM y FRA), se puede continuar con la formación específica (PC6). Este programa de 2 años, pone énfasis en consolidar la vocación, preparar las bases de la empresa personal del futuro formador y, asegurar la competencia de animación requerida para el lanzamiento como nuevo formador/a. Para ello, se trabaja con una guía pedagógica y se requiere participar en una serie de talleres y módulos.

En esta fase, además se comienza con: la animación de Grupos de Acompañamiento (GRAC) y de módulos de sensibilización; la participación en los tiempos de talleres de formadores/as; y la participación como pasante en el taller ‘¿Quién soy yo, hoy?’

Por otro lado, se requiere tener un acompañamiento de formación, un acompañamiento pedagógico y un acompañamiento personal.

Luego de este proceso se requiere facilitar el taller “¿Quién soy yo, hoy?”, acompañado/a de un miembro del equipo de formación. Posteriormente, se realiza un proceso de discernimiento final para completar el dossier de entrada al organismo PRH.